M. P. D. ¿Cuántas veces hemos oído que nunca es tarde para cambiar, para iniciar un nuevo camino? Es una frase que, no por repetida, deja de ser cierta. Y hoy hemos querido traer hasta aquí un buen ejemplo de ello. Se trata de la historia de Alicia Sánchez Torres, una sevillana, nacida hace 40 años en Morón de la Frontera y residente desde hace 17 en la provincia de Huelva, que, después de trabajar durante cerca de dos décadas en la hostelería, al cumplir 30 años y con un hijo, decidió darle un giro radical a su vida. ¿La forma de hacerlo? Volver a estudiar. Así que, sin pensárselo dos veces, Alicia se matriculó en el Grado medio de Gestión Administrativa. Y lo cierto es que le fue bastante bien. Así que, según nos cuenta «decidí dar un salto más y realizar mi sueño desde pequeña: ser maestra. Para ello, aprobé la prueba de acceso a mayores de 25 años y saqué mi carrera de Magisterio en la Universidad de Huelva. Lo hice siendo madre de dos niños pequeños, trabajando y, por supuesto, con muchas ganas e ilusión, sin olvidar la ayuda de mi marido y de toda mi familia». Es más, cuando acabó la carrera, no se quedó ahí y decidió dar un paso más allá estudiando un Máster, estudios que pudo realizar gracias a una Beca de la Fundación Atlantic Copper.
Como se puede comprobar, Alicia es todo un ejemplo de superación, lo que prueba que, cuando tenemos claro nuestro objetivo, con esfuerzo, podemos conseguirlo. Sólo hay que atreverse a dar el primer paso. Una lección de vida que hemos querido conocer en primera persona a través de esta entrevista.
-Alicia, ¿cómo accediste a las Becas de la Fundación Atlantic Copper?
-Fue por casualidad, aunque no creo en las casualidades. Quería hacer un Máster por la mañana, para poder compaginar mi vida familiar y con los estudios, pero me dijeron que no había, así que desistí en la idea. Sin embargo, un día de visita a la universidad me enteré por una maestra que había un Máster por la mañana. Y resultó ser el que me gustaba a mí, al ser de Orientación Educativa. Fui a hablar con el director del Máster y, aunque había terminado el plazo de matriculación, por falta de alumnos lo habían ampliado, así que pude entrar. Eso sí, me encontraba fuera de plazo para solicitar las becas del Ministerio. A pesar de ello, a los dos días, una compañera me envió un enlace que otra maestra había puesto en Twitter sobre la beca Atlantic Copper. Me metí, vi que cumplía los requisitos y lo mandé. Al cabo de un tiempo, me llegó un correo diciéndome que me habían aceptado la beca. Imagínate mi alegría.
-¿Qué supuso para ti?
-Si no hubiera sido por la beca Atlantic Copper, no hubiera podido costearme los 1.800 € que valía el Máster.
-¿Qué te permitió conseguir este Máster?
-A día de hoy, estoy preparándome para las oposiciones, y, gracias al Máster, mis puntos para los méritos son mayores. A parte de esto, me dio la oportunidad de hacer unas prácticas en el Ayuntamiento de Cartaya, que es donde resido desde hace 14 años, pudiendo participar en proyectos de apoyo a los jóvenes en centro educativos.
-¿Por qué estos estudios en el ámbito educativo?
-Después de trabajar 23 años en la hostería, pensaba que podía hacer algo más y cumplir mi sueño. Creo que la educación es la base de toda sociedad. Por este motivo, desde este ámbito, me gustaría aportar mi granito de arena. Así que mi objetivo profesional es ser una maestra que deje huella en los corazones de los niños.
-¿Qué estás haciendo en estos momentos?
-A parte de seguir trabajando en la hostelería, ser madre y llevar una casa, me estoy preparando las oposiciones para el próximo año.
-¿Cómo has logrado obtener lo que te proponías?
-Mucha gente lo llama casualidad, pero, como he dicho anteriormente, no creo en las casualidades y creo que formar parte de este proyecto, de las becas de Atlantic Copper, fue un añadido más para creer en que, cuando algo es para ti, de una manera u otra, al final aparece. Y yo quería hacer ese Máster. Y como dice Paulo Coelho: “Cuando deseas algo de corazón, el universo conspira para que lo consigas”.
-¿Cuál es tu sueño?
-Ser maestra en Huelva para poder dar todo lo que he recibido de esta tierra.
-¿Algún mensaje a los onubenses?
-Aunque no soy de Huelva de nacimiento, llevo 17 años viviendo aquí. Y, después de haber trabajado fuera de Andalucía, veo que Huelva es muy rica en todos los sentidos: montaña, playa, recursos y, sobre todo, su gente. Tiene mucho potencial y hay que creer en esta tierra de posibilidades. A mí me ha aportado mucho y solo puedo dar las gracias por ello. Así que muchas gracias a Huelva y a la Fundación Atlantic Copper. El mayor impedimento que una persona puede tener para hacer algo está en su mente.