Redacción. Internet es definitivamente el foro y la herramienta de comunicación más importante de la historia. También prolifera diariamente su uso como mercado de todo tipo de productos. La farmacovigilancia no puede ser ajena a este fenómeno, y por eso cada vez más empresas farmacéuticas destinan recursos a conocer qué comentarios provocan sus medicamentos en foros y redes sociales. Rastrear este tipo de comportamientos es posible gracias a herramientas de monitoreo o seguimiento como el software de escucha activa para farmacovigilancia.
El marketing se ha ocupado rápidamente de extraer la información más valiosa para tomar decisiones sobre público, diseño y producto. La farmacovigilancia, con un propósito muy diferente, acomete ahora un trabajo similar de recogida de información para conocer las reacciones que provocan los fármacos en un público cada vez más accesible gracias a las telecomunicaciones.
Desde mediados de la década de los sesenta las empresas farmacéuticas rastrean los efectos producidos por los medicamentos que recetan. Este trabajo se ha convertido en una tarea continua y no restringida a los ya amplios períodos establecidos por los protocolos de aprobación de un fármaco.
La necesidad de dar solución a las enfermedades o mejorar los tratamientos hace que resulte imposible prever todos los posibles efectos que una molécula pueda provocar en el organismo, o interactuando con la infinidad de productos químicos con los que ésta pueda entrar en contacto una vez en el cuerpo humano. Así, aunque los períodos de aprobación de un fármaco son amplios para evitar en la medida de lo posible efectos no deseables, es virtualmente imposible asegurar un porcentaje de seguridad total en cualquier sustancia.
Afortunadamente, los profesionales sanitarios, cuentan con estrictos procesos para rastrear los efectos no previstos de medicamentos que recetan. No obstante, sigue existiendo una vasta cantidad de información que no llega a los expertos, o no lo hace, al menos, a través de las vías convencionales. Es en este punto en el que cobra gran relevancia el trabajo de búsqueda y filtro de menciones de efectos comentados por usuarios de internet.
Esta tarea puede resultar titánica, atendiendo a la gran cantidad de información vertida diariamente en blogs, redes sociales, foros y diarios digitales. No obstante, existen herramientas que logran en cierta medida filtrar y seleccionar contenido relevante basado en determinadas palabras clave, que normalmente se refieren al nombre comercial o genérico de algunos medicamentos. Así todo, y a pesar de la mejora continua de la Inteligencia Artificial, el análisis del lenguaje natural, y el aprendizaje automático, resulta fundamental la supervisión humana para identificar qué menciones resultan útiles para la labor de farmacovigilancia.
Ese es, grosso modo, el importante trabajo que desarrolla Farma Radar, empresa de farmacovigilancia online, una tarea de aplicación de la tecnología sobre la ingente miríada de menciones sobre los efectos que un fármaco en circulación ha provocado en un paciente, y que permiten además extraer datos acerca de opiniones, sentimiento de marca y ubicación de brotes epidémicos a una velocidad antes imposible hasta la proliferación del uso de internet en todo el planeta.