HBN. Son múltiples los atractivos que tiene la comarca del Condado de Huelva a nivel turístico. La cultura del vino, el río Tinto, el Descubrimiento de América, Doñana, el Condado de Niebla y las fiestas y tradiciones, como las romerías o las cruces, son algunos de los elementos identitarios de la comarca. Valores que han sido recogidos en un proyecto audiovisual, en el que se muestra porqué es una buena idea visitar este rincón de la provincia de Huelva. Un video que puedes ver a continuación:
Toda una comarca por descubrir. Esta comarca onubense se encuentra íntimamente ligada al Descubrimiento de América, lo que sitúa a Huelva en un lugar privilegiado de la Historia. Cuenta con espacios de gran relevancia turística como el Muelle de las Carabelas, en La Rábida o el Convento de Santa Clara, en el municipio de Moguer.
El Condado tiene también una importante zona de costa, ya que el litoral onubense no se interrumpe a la llegada de la capital sino que prosigue por el lado oriental de la provincia, encontrándose en armoniosa convivencia con el Parque Nacional de Doñana. Mazagón y Matalascañas conforman dos núcleos costeros de gran atracción turística, donde las playas urbanas se mezclan con otras vírgenes y con espacios de interés paradisíacos y de gran interés paisajístico. El máximo exponente es el monumento natural del Asperillo, una zona acantilada de sistema de dunas fósiles, sin duda, de las más singulares de la Península, rodeada de una extensa vegetación que limita de forma natural con Doñana.
Parque Nacional, Reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad. Doñana es un conjunto de ecosistemas donde habitan más de 300 especies de aves distintas, además de otras tantas de reptiles y mamíferos. Sus 108.000 hectáreas la convierten en la gran reserva natural de Europa. Los paisajes de Doñana son frecuentados cada año por miles de personas que peregrinan a la aldea de El Rocío. Cada lunes de Pentecostés, en el corazón de Doñana, se desarrolla desde hace muchas centurias la expresión religiosa más importante de España, que aglutina a casi un millón de personas.
En un territorio donde la naturaleza es generosa, se cultiva uno de los productos estrella de la gastronomía onubense. Desde tiempo de los romanos, las vides han ido coloreando los campos del Condado. Los labriegos han ido perfeccionando la técnica para obtener vinos y vinagres de gran calidad a partir de la uva zalema. Esta industria ha originado toda una cultura del vino que se palpa en cada rincón de los municipios vitivinícolas, lugares en los que se pueden visitar antiguas y modernas bodegas, convertidas hoy en museos.
