María del Mar Márquez, una onubense afincada en Barcelona que se presenta a través del perfil ‘fashionhousewife’

M. P. D. Los blogs y las redes sociales han abierto un amplio abanico de posibilidades para aquellas personas con inquietudes a la hora de expresarse, independientemente de su edad, profesión o estado civil. En esta línea, hoy queremos conocer el caso de María del Mar Márquez Cárdeno, una onubense nacida hace 40 años en la capital onubense, en el barrio de Fuentepiña. Tal y como ella cuenta, «nací y crecí en Huelva, en el bonito barrio de Fuentepiña. Como todos los niños de aquella época, tuve una infancia feliz que transcurrió entre juegos en la calle, con los amigos y los estudios, sin imaginar que en un futuro próximo todo se podría hacer a través de una pantalla». 

En concreto, María del Mar estudió auxiliar administrativo, teniendo que trabajar desde muy joven, por motivos personales. Una actividad que ha compaginado con su pasión por internet y las redes sociales, donde es una persona muy activa, mostrando su propia personalidad en todo lo que hace. Ahora, desde Barcelona, se presenta ante el mundo bajo el alias de ‘fashionhousewife’.

-María del Mar, una de tus experiencias como bloguera ha sido con la página ‘Lo que calla La Posh’. ¿Cuándo y por qué lo pusiste en marcha?
-El primer blog que tuve, lo hice poco después de llegar a Barcelona. Buscando información en internet sobre una tienda de moda, di con un blog de una chica que mostraba sus outfits, contándonos sus quehaceres diarios. A través de ella, conocí mas páginas parecidas. Me enganchó. Me parecía una idea genial para inspirarnos a la hora de vestir, fijándonos en gente real y no lo que se veía en las revistas. Así estuve varios meses como una simple lectora y, al final, me animé a crear uno. De aquella primera experiencia guardo muy buenos recuerdos. Los blogs de moda de aquellos años no tienen nada que ver con los de ahora. Quizás no éramos tan “profesionales”, pero eran cien por cien reales.

-¿Cómo diste el salto a las redes sociales?
-A las redes sociales salté de la mano de Instagram. Era una manera de seguir haciendo lo mismo que en el blog, pero de una forma muchísimo más fácil, sin tener que dedicarle tanto tiempo. Fue así cómo me animé a crearme el perfil de ‘fashionhousewife’. 

-Te defines como una huelvana perdida en Barcelona….
-Tengo que agradecerte que me deis la oportunidad de explicarme sobre mi hashtag, porque siempre he tenido muchas críticas por utilizar lo de  “huelvana”. Y lo de perdida, es algo metafórico. Todo empezó con el blog, porque en la descripción de mi perfil quería dejar claro de dónde era. Al principio, aquí en Barcelona, me sentía un poco perdida. Hay que tener en cuenta que salir de nuestra Huelva, tan “petita” ella, y venir a vivir a Barcelona es un gran cambio. Porque, una cosa es ir de vacaciones y otra es vivir en esta ciudad tan gigante. Así que, realmente, al principio me sentí perdida muchas veces. Cuando hablaba con mis familiares y amigos les decía: “Soy la choquera perdida por Barcelona”. Y me pareció un término muy curioso y gracioso para darle forma a mi blog, que iba de eso, de ir mostrando Cataluña y, en concreto, Barcelona, a través de mis looks. Pero, me di cuenta de que los términos choquera y onubense no eran  muy conocidos, así que decidí usar el término de huelvana. Creo que así dejo muy claro de dónde soy. 

-¿Cómo llegaste a Barcelona?
-Por amor. Conocí a mi marido en Sevilla, nos presentó una amiga en común. Él ya vivía aquí y, después de dos años de relación, con muchos kilómetros de por medio, decidí instalarme aquí, en Barcelona. 

-¿Qué características tiene tu perfil?
-Se puede decir que está catalogado en el apartado de moda, sí. Pero no soy la típica instragramer de las que predominan ahora. Siempre intento ser real. No digo que las demás no lo sean, pero, evidentemente, ese boom de intentos de influencers que existe es un submundo que a mí no me agrada. También  soy muy criticona. Algunas de mis seguidoras me denominan la hater buena, porque critico ciertos comportamientos, que no dejan de ser los mismos pensamientos que mucha gente tiene, pero parece que hay cierto temor a expresarlos. Eso sí, lo hago con humor y, siempre, con respeto.

Además de todo ello, se diferencia, sobre todo, porque me lo tomo como un hobby que, a veces, da grandes oportunidades. Pero nunca me he olvidado de que se trata de una red social y no un trabajo. Un perfil donde, por otra parte, intento mostrar mi estilo de vida mayormente basado en el lowcost, enseñar que no hace falta gastar mucho para vestir bien y que disfrutar de ciertas cosas no son inalcanzables, como, por ejemplo, ¡hacer un picnic en algún rincón bonito!

-¿Complementas esta ocupación con alguna actividad a nivel profesional?
-Actualmente, como dice mi perfil, soy una ama de casa intentando ser fashion.  También reivindico mucho en mi Instagram el trabajo del ama de casa, porque, hoy en día, parece que somos un bicho raro, cuando siempre ha sido el trabajo más duro y con menos reconocimientos de la historia. Por eso, creo que ¡deberíamos revelarnos más!  Ser ama de casa no es quedarte en casa, porque sea la opción más fácil y cómoda. Siempre hay una historia detrás y un gran trabajo.

-¿Tienes algún otro proyecto para el futuro?
-Ideas tengo muchas, pero intento no pensar en el futuro. Soy agradecida con lo que tengo. Vivir el día a día, intentando ser feliz. Y, seguramente, algún día le daré forma a esas inquietudes que tengo. 

-¿Algo que te gustaría conseguir?
-Desde hace mucho tiempo, tengo en mente algo relacionado con la moda. Soy una apasionada del vintage, por lo que sí me gustaría emprender algo en este ámbito y en mi Huelva, para que la gente aprendiera, como yo he aprendido, a ver algo más que un vestido o un bolso. Hay historias maravillosas detrás del vintage.

-¿Echas mucho de menos tu tierra? ¿Qué es lo que más recuerdas de Huelva?
-Aunque ya llevo más de una década por tierras catalanas, la echo de menos. Al principio sí fue más duro, echaba de menos todo…, pero ahora ya estoy más adaptada. Lo que más extraño es a la familia y, en algunos momentos, me acuerdo de ciertas cosas,  como la sensación de pasear descalza por alguna orilla de nuestras playas… Ahora mismo me acuerdo de un platito de habas enzapatás con un vinito del Condado…

-¿Algún mensaje final?
-Quiero aprovechar la oportunidad para dirigirme a cierto público que usa las redes sociales en el tema moda. En los últimos tiempos, se ha desmadrado mucho. He ido viendo como una lucha por hacerse un hueco, por hacerse notar, porque las marcas se fijen en ti, bloggers conocidas haciendo ver que todo es posible, hablan de sueños que se pueden conseguir de la nada… Instagram es usado por muchos adolescentes que se deslumbran por tanto divinismo. Por este motivo, creo que las bloggers de renombre podrían pensar un poco más en ese público joven.