S. D. Naturaleza y Deporte otra vez se van a dar la mano con la disputa de la XI Travesía Marismas del Odiel, que se celebrará este sábado a partir de las 12:00 horas con salida y meta en el centro de recepción Anastasio Senra. La carrera va a servir de cierre del Circuito de Gran Fondo 2017 de la Diputación Provincial de Huelva.
La prueba recupera su recorrido habitual después de la edición especial de 2016 con salida desde el Paseo de la Ría de Huelva por el décimo aniversario de su fundación. El itinerario, llano casi en su totalidad, consta de 16,2 kilómetros. Los primeros 2.200 metros se extienden por asfalto y el resto por campo, en el interior del Paraje Natural.
La organización mantendrá abierta la inscripción hasta este viernes a las 15:00 horas en el portal www.fedatletismoandaluz.net, con un cupo máximo de 550 atletas. El límite está condicionado por las figuras de protección del espacio.
Esta particularidad también impulsa el objetivo de ‘cero residuos’ durante la carrera, para evitar la llegada de plásticos a la marisma, la playa y el mar. El uso de depósitos de basura tras los avituallamientos es obligatorio, ya que de lo contrario los jueces tienen potestad para realizar descalificaciones.
“Damos por hecho que no se llega a esos extremos porque el usuario deportista es por regla general un usuario con conciencia medioambiental. Así se ha demostrado en ediciones anteriores y así será este año en una carrera que se ha convertido en una seña de identidad del atletismo onubense”, declaró el delegado territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Antonio Cortés, durante la presentación de la Travesía. El representante de la Junta de Andalucía estuvo acompañado por el diputado de Deportes de la Diputación Provincial, Francisco Martínez, la concejala de Deportes del Ayuntamiento de Huelva, María José Pulido, y la jefa de la División de Medio Ambiente de la Autoridad Portuaria, Rocío López.
Las firmas Aguas de Huelva y Salinas del Odiel también tienen una implicación directa en la undécima edición de la prueba. “Sin la colaboración de la comunidad que se ha formado en torno a esta Reserva de la Biosfera sería imposible sacar adelante año tras año la Travesía”, recordó el delegado territorial.
Cada edición de la Travesía Marismas del Odiel se plantea sobre una temática de avifauna concreta. En esta ocasión, la dirección del espacio protegido ha elegido el zampullín cuellinegro (Podiceps nigricollis), una especie emblemática de la Reserva de la Biosfera. Miles de ejemplares regresan todos los años a Marismas del Odiel para buscar la alimento y tranquilidad que necesitan para el cambio de plumas.
“Este estuario onubense es una localización estratégica y vital para las poblaciones de zampullines, ya que la especie utiliza el espacio para pasar ‘la mancada’ (renovación de plumaje), aprovechando los recursos alimentarios y la idoneidad del entorno para el descanso y protección”, detalló Cortés.
La Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio trabaja desde hace más de dos décadas en seguimiento científico de esta especie, con la implicación de voluntarios y en colaboración con la Estación Biológica de Doñana.
El estudio ha permitido obtener datos y conocimientos sobre el zampullín cuellinegro, como longevidad, los países de procedencia, fundamentalmente del Norte de Europa y Asia, rutas migratorias, relación de sexo…