Redacción. La XXXI edición del Festival Coral del Atlántico cerraba anoche sus puertas hasta el próximo año, y lo hacía con las actuaciones de dos formaciones de alto nivel, una de ellas, la venida de Rota (Cádiz), el Orfeón ‘Virgen de la Escalera’ y la otra, con acento local, la Coral Polifónica ‘Isla Cristina’.
El Templo volvía a registrar un lleno absoluto, confiriéndole a la muestra vocal un nuevo éxito, tanto en la calidad de las formaciones, como en la respuesta del público que ha acudido cada noche a disfrutar de los conciertos, no en vano, son ya treinta y un años del certamen, convirtiéndolo en cita ineludible para masas corales nacionales y extranjeras.
En representación del ayuntamiento asistían la Delegadas de Cultura, Ana Vieira y Laura López Pichardo, así como el Teniente de Alcalde, Agustín Ponce y varios miembros de la Corporación Municipal.
Abría la noche el orfeón gaditano que, bajo la dirección de Severiano Alonso, ofrecía un repertorio basado en canciones populares y textos de grandes poetas andaluces, como Federico García Lorca o Rafael Alberti, entre otros.
Una vez finalizaban su actuación, el Teniente de Alcalde, Agustín Ponce, hacía entrega a su director del emblema del Festival, el caballito de mar en forma de la clave musical de Sol, y agradeciéndoles “en nombre del Ayuntamiento y del Pueblo de Isla Cristina su participación”, poniendo de manifiesto, “los vínculos existentes entre Rota e Isla Cristina, desde el siglo XVIII, con personajes de la Villa que influyeron en nuestra historia”, destacando también “la participación de este orfeón en tres ediciones de este festival, un recuerdo que debemos guardar siempre.”
Al mismo tiempo, y como gesto también de agradecimiento, el director de la coral invitada hacía entrega al Ayuntamiento de unos obsequios conmemorativos del momento que recibía el Teniente de Alcalde isleño.
La noche continuó con la actuación de la Coral Polifónica ‘Isla Cristina’, dirigida por el maestro Vicente Sanchís, fundador y primer director de la muesta, y Virginia Peña. La formación isleña volvía a demostrar la calidad de sus voces con un programa sencillo, compuesto por temas tradicionales, populares y de producción propia, escritos y musicados por Sanchís y con el recuerdo en la mente de uno de sus componentes fallecido recientemente, Arturo Aquino González.
Una vez finalizada la actuación de esta última Coral que ponía el broche a esta edición del Festival, la Delegada de Cultura, Laura López Pichardo, clausuraba esta trigésimo primera edición de la muestra vocal, no sin antes hacer entrega del emblema del Festival a Vicente Sanchís y diciendo que “es para mí un placer poder clausurar este festival y hacerlo con este broche de oro, el que ha puesto la Coral Polifónica Isla Cristina” decía la edil, que daba la enhorabuena a sus directores, Vicente Sanchís y Virginia Peña y a todos su componentes “por este magnífico repertorio que nos habéis ofrecido esta noche” al tiempo que agradecía a esta formación, “su colaboración, una vez más, con el Festival.”
La Delegada de Cultura ponía también de manifiesto el agradecimiento del Ayuntamiento y de todo el pueblo isleño “a todas la corales que nos han visitado este año, como las que han llegado de Centroeuropa o las que han venido de otras provincias, que han aportado belleza y calidad al Festival garantizando el éxito del mismo”, agradecimiento que hacía extensivo de una forma especia,l a las Corales isleñas, dirigidas por Aurelio Jara y José Alfonso Jara; Vicente Sanchís y Virginia Peña, porque, como dijo “sin vuestro tesón y labor a lo largo de todos estos años este festival no hubiese sido posible.”
Para finalizar, Laura López Pichardo señalaba que, “desde la Delegación de Cultura, tanto para mi, como para mi compañera, Ana Vieira, ha sido un placer haber podido organizar este año, por primera vez, el Festival Coral del Atlántico.”
Por último, cabe destacar, como notas predominantes en esta XXXI Edición del Festival Coral del Atlántico, la masiva afluencia de público y la calidad de las agrupaciones vocales a lo largo de tres días en los que el Templo Parroquial Nuestra Señora de los Dolores ha vuelto a registrar un lleno absoluto y en los que se han podido disfrutar de unos extraordinarios conciertos en los que han brillado la calidad y texturas de las voces y la gran variedad de temas y estilos volviendo a demostrar la importancia de este festival no sólo a nivel provincial, o regional, sino nacional e internacional.
