A.R.E. El sector minero de la provincia de Huelva y su repercusión a nivel medioambiental ha sido el punto de partida de la tesis doctoral “Incidencia de los procesos AMD en la hidroquímica de embalses afectados en la Faja Pirítica Ibérica”, un trabajo elaborado por la onubense María Santisteban Fernández que ha sido ya reconocido con tres galardones.
En concreto, María ha logrado sacar adelante un estudio que ha permitido obtener, por primera vez, una visión global y real del estado hidroquímico de todos los embalses de la provincia de Huelva. Una minuciosa labor que le ha valido el Premio Extraordinario de Doctorado de la Universidad de Huelva, el Premio Fin de Máster al mejor trabajo de investigación (por el estudio preliminar de lo que posteriormente sería su tesis) y el Premio AIQBE a Tesis Doctorales.
Santisteban, natural de Huelva capital aunque residente en El Rompido, es licenciada en Geología, además de Ingeniero Técnico de Minas, y también ha realizado el Máster Oficial en Tecnología Ambiental de la Universidad de Huelva. En 2011 comenzó sus tesis doctoral, que finalizó y defendió en 2015, ello gracias a la financiación del Ministerio de Ciencia e Innovación, que le otorgó una beca de Formación de Personal Investigador (FPI) de la que disfrutó durante estos cuatro años.
Bajo la dirección de los profesores José Antonio Grande Gil y María Luisa de la Torre Sánchez, de la Universidad de Huelva, y Teresa Fernandes Valente, de la Universidad de Minho, la onubense desarrolló su estudio. Éste se centra en la caracterización de las cargas contaminantes transportadas a los embalses presentes en la red fluvial de la Faja Pirítica Ibérica en la provincia de Huelva, debido a los procesos de contaminación por “Drenaje Ácido de Mina (AMD)”, el cual se debe principalmente a la minería de sulfuros, muy abundante en la provincia de Huelva.
Para llevar a cabo este trabajo de investigación, María realizó, durante dos años hidrológicos, trabajos semanales de monitoreo y muestreos de agua en una totalidad de 23 embalses de la provincia onubense, los cuales se encontraban contaminados como consecuencia de la actividad minera. Todo ello le ha permitido conseguir una visión global y real del estado hidroquímico de estas masas de agua, con especial atención en los contaminantes menos deseables, algo nunca obtenido hasta ahora.
«La modelización de estos espacios afectados por la actividad minera es una herramienta indispensable para el diagnóstico previo a la implementación de medidas preventivas y correctoras», explica la doctora.
Y es que esta investigación persigue contribuir al gran reto mundial de hacer una minería más sostenible, «especialmente a lo que se refiere a metales bases, en los que Huelva es un foco productor paradigmático debido a su producción histórica de cobre, y también de otras ‘sustancias’, que por discreción académica no cito, y que ocupan un lugar privilegiado en el mercado por su carácter estratégico y están presentes en los miles de hectáreas ocupados por escombreras en diferentes provincias metalogenéticas», apunta Santisteban.
El trabajo de la onubense se enmarca en el objetivo central y el horizonte a corto plazo del tema acuñado en la Universidad de Huelva y definido como “minería circular”, consistente en la reintroducción en el ciclo productivo de todas aquellas sustancias de interés presentes en los residuos mineros “heredados” de la actividad minera actual y anterior.
Por otro lado, María continúa trabajando en temas relacionados con la temática de su tesis, ámbito en el que además desde la UHU han firmado nuevos acuerdos de colaboración internacionales con Colombia y Perú. Su labor investigadora la simultanea con la docente, y es que desde hace seis años es profesora en el área de Prospección e Investigación Minera del Departamento de Ingeniería Minera, Mecánica, Energética y de la Construcción. En este tiempo ha impartido asimismo clases como Profesora Ayudante Doctor en la Universidad Politécnica de Madrid, también en el área de Prospección e Investigación Minera del Departamento de Minas y Energías.
De cara al futuro, Santisteban reconoce que le gustaría «seguir trabajando como docente e investigadora, pudiendo aportar todo mi conocimientos y experiencia a los alumnos y a toda la comunidad científica».
Su tesis doctoral es un ejemplo de esa predisposición a compartir su saber, un estudio que no hubiera sido posible sin sus directores, a los que la joven agradece que creyeran en ella desde el primer momento y la orientaran y guiaran durante toda la etapa doctoral, «cosa que aún siguen haciendo, ya que seguimos trabajando juntos. Gracias al apoyo de ellos he crecido en el mundo de la docencia en investigación», afirma María.
La doctora se siente además muy agradecida a AIQBE por la concesión de la distinción otorgada, que ha sido para ella, según reconoce, «una alegría y satisfacción, ya que ves recompensado tu esfuerzo y trabajo durante mucho tiempo«. De su trabajo, considera que la Asociación ha valorado especialmente su formación académica, así como la oportunidad de la temática abordada y la amplia producción científica derivada del análisis.
En suma, Santisteban ha logrado elaborar un análisis con el que espera contribuir al desarrollo sostenible de un sector crucial en la económica de muchos países del mundo y, especialmente, de la provincia onubense.
