Sergio Borrero. El próximo 14 de noviembre la Hermandad de la Santa Cruz comenzará a escribir un nuevo capítulo en su aun breve historia. La Parroquia de Santiago Apóstol verá salir por su dintel por última vez a Nuestro Señor Jesús de la Providencia y María Santísima Madre de Gracia. La Concepción, donde se empezó a gestar la cofradía en sus inicios, acogerá desde ese día a los titulares de la Hermandad, si bien, la vinculación con el barrio del Molino no se perderá. Allí se seguirá viviendo el día a día de la cofradía y seguirá colaborando la hermandad tanto con la parroquia como con la feligresía. Para conocer más detalles del cambio de sede canónica hablamos con Juan Javier Márquez Cabeza, hermano mayor de la Santa Cruz.
Finalmente la Hermandad ha podido conseguir uno de sus sueños, volviendo al lugar donde se empezó a gestar la cofradía. ¿Cómo se está viviendo estos días en la Hermandad?
Pues con inmensa alegría y satisfacción porque realmente esto está refrendado por un cabildo de hermanos de casi el 50% de los hermanos con derecho a voto, un porcentaje muy alto, y con una unanimidad e incluso aclamación ya que la gente que llenaba el salón de la casa hermandad rompió en aplauso cuando se comunicó la noticia. Eso nos da un impulso enorme a la junta de gobierno. No ha habido ningún hermano que nos haya mostrado su contrariedad. Ese cambio al sitio donde realmente se fundó la cofradía para nosotros ha sido motivo de satisfacción por todos lados.
¿Qué supondrá para la Hermandad de la Santa Cruz el cambio de sede?
Yo creo que será un antes y un después. Hay que tener en cuenta que es una cofradía que estando erigida en un barrio, es una cofradía que es de silencio estricto. Nosotros al barrio del Molino le estaremos agradecido eternamente, sobre todo a su feligresía. Les estaremos agradecido enormemente porque fue la salvación que en ese momento teníamos cuando tras tres años nos dijeron que en la Merced no se podía fundar ninguna hermandad más. El palo fue tremendo y nos metimos en el único sitio que nos abrió las puertas gracias a D. Manuel Martín. Yo creo que en la Concepción vamos a ganar en todo, tanto en nuestra forma de procesionar como en el número de personas que puedan conocer a nuestros titulares. Pienso que este cambio va a ser un trampolín para la cofradía.
Hace unos años, se propuso también un cambio de sede, en este caso hacia la Parroquia de San Sebastián, lo cual provocó una división en el seno de la cofradía, ¿qué ha cambiado ahora respecto a aquella propuesta?
Fundamentalmente ha cambiado la iglesia a donde vamos. Aquello fue un síntoma de que la Hermandad donde estaba empezaba a notar problemas de espacio y de todo, además en aquel momento no nos dejaban ni salir en Semana Santa de la Merced. José Antonio Omist, párroco de San Sebastián, se enteró de la extraña circunstancia de nuestra Hermandad y nos propuso el cambio. La junta de gobierno vio adecuado proponerlo a los hermanos y si es verdad que hubo una división, ganó el sí pero con un porcentaje de votos pequeño como para que el obispado diera su beneplácito. Ahí acabó la cosa, había gente ilusionada y gente que no veía aquel cambio, incluido los vicarios de aquel tiempo.
¿El cambio ha sido propuesto por la Hermandad o vino del párroco de la Concepción?
Cuando entré en el cargo de Hermano Mayor acordamos en junta no tocar este tema, ya que estaba muy reciente el caso de San Sebastián. Sin embargo en el verano de 2014 se produjo un cambio en la curia y en ese momento nos vimos en la necesidad de explicar a los vicarios nuevos nuestra situación para que la supieran, las limitaciones que teníamos y también se lo hicimos saber al presidente del Consejo. En cuestión de unos meses veíamos que nos arropaban entre todos para buscar una alternativa y que la más lógica que todos veíamos era la Concepción. Un día fuimos a ver a D. Diego Capado, conocedor ya de nuestra situación, y nos dijo que lo iba a estudiar, a empezar a trabajarlo y al final todo ha salido bien.
La Hermanad deja el barrio del Molino, donde se erigió canónicamnte y donde ha crecido durante todos estos años, ¿no era viable ninguna alternativa de futuro que pasara por quedarse en el barrio?
Hace mucho tiempo ya se planteó la idea de la construcción de un nuevo templo en el barrio del Molino pero la Junta de Andalucía dijo que no. Nosotros hablamos con todos los estamentos posibles y finalmente el ayuntamiento cedió unos terrenos en el parque, dijimos que para adelante pero la Junta de Andalucía no permitió la construcción al ser zona verde. No había ninguna otra zona en el barrio que nos pudiera ceder el ayuntamiento y nosotros no teníamos ni tenemos los recursos necesarios ni la posibilidad de construir una capilla. De todos modos creo que el cambio a la Concepción, para nuestra idiosincrasia, nuestra idea de fundación, es lo ideal.
¿Existe cierto temor en el seno de la cofradía a ver frenado el crecimiento de la Hermandad en el centro?
Yo no lo tengo, creo que nos va a conocer mucha más gente que ahora mismo y no veo esto como una competición con las demás hermandades. Cada hermandad tiene su espacio y sus características, cada persona se identifica con una imagen, una devoción, la manera de ser de la hermandad… Pienso que para nosotros, entre el Molino y el centro, no va a haber parangón, como decía antes creo que va a haber un antes y un después y creo que experimentaremos un crecimiento llamativo.
Mucho se ha hablado desde que se anunciara este cambio de sede sobre el lugar que ocuparán las imágenes en la Concepción, más aun tras la negativa de la Consejería de Cultura al lugar propuesto por el párroco, ¿se sabe ya donde se colocarán los titulares de la Hermandad?
Provisionalmente las imágenes estarán en la capilla bautismal, tras el traslado. En cuanto al sitio definitivo estamos ilusionados con algunas ideas que nos han transmitido pero entendemos que aun no es el momento de decir nada porque faltan aun flecos que confirmar. En la capilla bautismal no quiere D. Diego a ninguna cofradía, además que la pila es fija y las imágenes no sabemos bien como podrán caber allí. Por ahora ese emplazamiento será provisional por un tiempo, no sabemos aun durante cuanto tiempo.
La Santa Cruz llega ahora a un templo donde habitan cuatro hermandades con un calendario cultual muy amplio durante todo el año, ¿supondrá eso algún cambio de en los cultos anuales de la Hermandad?
A las hermandades a partir de ahora en los estatutos, tras la renovación de las normas diocesanas, se nos prohíbe poner una fecha concreta para los cultos. Uno de los cultos que cambiarán sí o sí será la función a María Santísima Madre de Gracia, que siempre solemos celebrarla bien el 8 de diciembre, bien la víspera y obviamente en la Concepción no podremos hacerlo, pero bueno, eso es un mal muy menor en esta situación. En cuanto a los demás cultos, los otros días nos sentamos con el párroco y en pocos minutos cuadramos todos nuestros cultos sin problema.
Este cambio también repercutirá en los horarios e itinerarios de una jornada difícil como es la del Miércoles Santo, ¿habéis hablado ya con el consejo y las demás hermandades del día?
Ya nos hemos reunido con el Consejo y las demás hermandades y no ha habido ningún problema con lo que nosotros habíamos propuesto. Saldremos a las 19:30h, tiraremos por calle Botica y nos incorporaremos tras el Prendimiento para hacer el mismo recogido que hacíamos antes, salvo que subimos por calle Rascón en vez de llegar hasta la Placeta. Iremos tras la Esperanza algo ajustados, aunque confiamos en que no haya ningún retraso y no tengamos ningún parón. Nosotros lo veíamos un poco raro pero en el Consejo no lo veían así, ya que la situación es muy parecida a la que se da el Jueves Santo entre la Oración y la Merced. No hemos tenido ningún tipo de problemas por ningún lado.
Para terminar, ¿cómo avanzan los demás proyectos de la Hermandad? ¿Veremos nuevos avances en cuanto al paso de misterio?
Si, va a haber novedades, una que no puedo confirmártela ya que no está aun seguro. Va a ser un cambio con el que vamos a ver algo distinto encima del paso, será una sorpresa. Y por lo demás pues seguiremos con los trabajos de talla del paso, ya se ha llevado el tallista el frontal del canasto que saldrá tallado el Miércoles Santo, aparte seguir completando el juego de insignias con unos faroles de mano.
1 comentario en «Juan Javier Márquez: “Yo creo que el cambio de sede marcará un antes y un después para la Hermandad de la Santa Cruz”»
Me alegro mucho que por fin tengáis sede canónica.OS lo merecéis, la cofradía le aportado a la SS de Huelva un recogimiento muy necesario.por otro lado sentiré mucho no disfrutar de ella por nuestro barrio del molino.