Redacción. Ayer se inauguró en el hall del teatro Felipe Godínez la última muestra del pintor moguereño Fran Cabeza, una serie de magníficos trabajos que recrean imágenes y detalles de los fondos marinos, tamizados por la imaginación del artista y con un valiente tratamiento del color que ha sorprendido al público por su fuerza y su impacto visual.
Tanto el primer mandatario moguereño, Gustavo Cuéllar, como la concejala de Cultura, Lourdes Garrido, destacaron la calidad del trabajo de Fran Cabeza, y agradecieron la cercanía y el afecto que siempre ha mostrado hacia su pueblo natal, destacando su aportación al inolvidable Año Platero con la realización del cartel del centenario.
Este joven pintor moguereño, Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, se dio a conocer logrando varios premios de reconocido prestigio como los certámenes de pintura ‘club de arte Paul Ricard’ o el ‘Ateneo de Sevilla’, y ha seguido enriqueciéndose y formándose hasta encontrar un particular lenguaje estético capaz de emocionar al espectador.
La obra que podemos disfrutar en el Felipe Godínez de Moguer hasta el próximo 1 de marzo, nos permite admirar el dominio que el artista ha alcanzado en técnicas tan diversas como el óleo, la acuarela o el acrílico, con las que Fran ha creado hasta medio centenar de obras de diversa temática, aunque la serie sin duda más significativa y de mayor impacto visual es la dedicada al mar, a sus fondos, colores y matices, que se convierte en uno de los trabajos más atractivos e impactantes de cuantos han pasado por la sala de exposiciones moguereña. El propio autor señalaba que en esta muestra ha destapado de alguna manera el tarro de todos los colores, y se ha atrevido a utilizarlos con plena libertad y energía en un trabajo que le ha satisfecho plenamente y que quiere compartir con la gente de su tierra.
Este nuevo proyecto artístico de Fran Cabeza comenzó a gestarse hace dos años durante su asistencia a un curso de semigrabado en el que «descubrí que la realidad puede tener matices de los que no somos conscientes a primera vista, y a partir de esa idea, comencé a imaginarme cómo serían los paisajes del fondo del mar que no alcanzamos a ver, y empecé a darles forma con mis pinceles, hasta lograr este resultado que podéis ver en la exposición».
Además de la colección dedicada al mar, Fran nos permite también acercarnos a otras vertientes de su rica creatividad artística con una serie de cuadros de pequeño formato, en los que los temas recrean animales, paisajes, motivos taurinos o estampas de un Moguer al que, comentaba el pintor, ‘me gusta siempre volver porque me siento querido y valorado, y por ello, es para mi un orgullo poder mostrar en mi pueblo el fruto de mi trabajo y de mi inspiración’.