(Las imágenes y el texto de este artículo, no corresponden a los contenidos del libro «Casinos de Huelva»)
Miguel Mojarro.
En los Casinos, incluso desde su origen mercantil, hay dos valores que han sido el apoyo callado de su evolución: La Estética y la Cultura.
Hoy, en los comienzos de eso que llaman nuevo año, es buen momento para iniciar una andadura por esos atractivos y sugerentes espacios, para comunicar sensaciones, proponer caminos y mirar hacia atrás en la Historia.
Puede observarse que en este capítulo de Casinos hay muchos nombres comunes que escribo con mayúsculas. Es simplemente porque hoy vienen a estas líneas con su personalidad de conceptos universales.
La Estética, en tanto que aporta su callada presencia a los deseos no confesados de los hombres de estar rodeado de belleza y armonía.
La Cultura, porque en su seno viven dos hijos que no acaban de ser paridos: La Historia y los Libros. Historia como realidad social y Libros como memoria del pensar de todos los tiempos.
Estética, Historia y Libros, van a ser protagonistas en estas líneas durante los próximos meses (Con permiso del Poder y si los Dioses no lo impiden).
Y desde la Estética, los casinos tienen mucho que decir con sus azulejos que son nota de calidad en un siglo XX que comenzó adornándose con ellos.
Con la Historia, los Casinos recordarán sus días de convivencia entre piedras, allá por los años en los que la Cultura era monacal.
Y acompañados de Libros, vamos a desgranar un proyecto que Azoteas trabaja al servicio de entidades y sociedades que buscan la calidad de sus actuaciones.
Conviene recordar algunas cosas de nuestros Casinos, para valorar la importancia que éstos tienen en su maridaje ancestral con los libros. Hay Casinos, como los de Nerva, en los que los libros pintan de saber su vida anterior. Otros, como el de La Zarza, conservan una espléndida librería tallada, en cuyo contenido se aprecia el amor de un pueblo minero por la Cultura. En Rociana, cada semana renace el afán de lectura con sus citas literarias. Y así muchas más menciones posibles que llenarían páginas con los amores entre Casinos y Libros.
El Equipo Azoteas tiene un proyecto de Evolución y Mejora de Entidades, que, aplicándolo a los casinos, contempla una oferta a los socios (y a los no socios), que puede ser una aportación importante en la lucha por la supervivencia de estas sociedades y su evolución.
De momento, hoy reproducimos el contenido de un programa de Radio Nacional en el que Azoteas esbozaba la idea fundamental:
«Tengo un amigo que comentó algo que ha conducido mi pensamiento hacia ámbitos casineros, sin que aparentemente se perciba una conexión directa.
Con el café delante, mi amigo decía: «Con esto de los falsos ídolos del fútbol, la gente se está olvidando de leer. No interesa más que lo que dicen «el uno» o «el otro», en el debate de moda»
Y no le falta razón. La lectura, fuente de placer en tiempos y lugares no lejanos, ha pasado a la caja de «lo pendiente», porque otras inmediateces ocupan su lugar.
Siempre hay libros, que hemos comprado para leer, pero están esperando turno. El tiempo hoy resulta escaso para todo lo que la sociedad actual demanda de nosotros. No renunciamos a leer, pero sí lo postergamos ante la urgencia de lo que más apremia. Y por la pereza esa.
Es como si no comiéramos jamón, por no tener que cortarlo. Cortar jamón es un rito que forma parte del placer. El que no coma jamón por no tener que cortarlo, poco le gusta el jamón.
Leer tiene también su rito previo, que hace que la lectura sea lo que es: Placer que deja en boca un sabor que permanece. Pero también le deja a la mente tareas inevitables. Tal vez eso sea el problema.
Los casinos tienen que dar un paso más allá de tener muebles librerías, más o menos bonitos (que los hay), con libros de la época que nadie lee.
Los casinos pueden dar pasos en la dirección de recuperar su lugar de emporios culturales y volver al prestigio de sus primeros años, que los hizo competir con ateneos e instituciones culturales históricas, como la Sociedad Económica de Amigos del País y otras semejantes.
Leer es privilegio de los que ponen los medios para poder hacerlo.
Como comer jamón».
Poco a poco, semana tras semana, iremos saludando a los Casinos, desde el camino que hoy comienza, cuando el nuevo año está despertando. Nuestros compañeros de ruta, la Estética, la Historia y los Libros.
Hoy, solamente desear a cada uno lo que cada uno elija. Que para eso es libre de tener caprichos.
Equipo Azoteas
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2 comentarios en «Los Casinos y los Libros: Un proyecto de calidad y ocio»
Como peregrino, penitente y cautivo de “mi” señor, seguiré impertérrito las nuevas aventuras casineras de D. Miguel y su equipo de Azoteas, pues no conviene prescindir del lujo que ofrece la lectura de sus artículos pero….y como él recomienda, degustando un plato de jamón.
Trataremos de ser dignos de la cota que Don Benito nos otorga. Esta nueva andadura por temas casineros, será exigente, pero sumamente atractiva para nosotros, porque el cuarto oscuro de la creatividad está lleno de sugerencias nuevas y diferentes.
También contaremos con la colaboración de Salomé de Miguel, en temas de su cosecha.
Pero siempre estaremos agradecidos a Benito de la Morena, por el privilegio de su lectura que acompaña y motiva.
Gracias de nuevo.