HBN. Miles de personas se han acercado a localidad milenaria de Niebla desde el pasado 31 de octubre y hasta este domingo 3 de domingo con motivo de su Feria Franca Medieval, una cita cultural que este año ha querido recuperar las fortalezas de su Castillo para desarrollar entre sus murallas una infinidad de eventos y espectáculos en los que niños y mayores han tenido la oportunidad de viajar al pasado, disfrutando de una de las primeras Ferias francas que se celebraban en España, y contando con multitud de novedades a las que se sumarán las ya tradicionales Feria Ganadera, de Muestras y el Mercado Medieval.
De esta forma, este municipio onubense se ha convertido en foco cultural de la provincia recreando una Feria de antaño con artesanos, ganaderos, muestras gastronómicas, espectáculos de teatro, música, danza, etc., y contando además con novedades respecto a ediciones anteriores. Y todo ello para conseguir “la autenticidad histórica de la cultura de los siglos XII – XV”, según explica Víctor Vega, responsable del Grupo Sentire, el encargado de organizar los eventos que permitirán a los asistentes viajar en el tiempo desde el interior del Castillo.
Los visitantes han tenido la oportunidad de realizar un recorrido que comenzaba en el siglo XII con la recreación del ‘Zoco Lablandalusi’, que ha traído hasta nuestros días a la Niebla musulmana con los talleres de oficios de la época -como por ejemplo los de cerámica y barro-, los espectáculos de música y danza y la muestra gastronómica con influencia arábigo andaluza.
Además del Zoco, otra de las novedades de este año ha sido la celebración de la Feria Medieval Cervecera en el marco de la Feria Franca, incrementando de esta forma el atractivo de la misma, que hasta ahora se celebraba en el mes de junio. En ella se ha invitado a los asistentes a degustar multitud de variedades de esta histórica bebida cuya producción convivió con la del vino en la antigua Ilipla.
Por otra parte, en esta edición los asistentes han podido degustar platos típicos de la época medieval a precios muy asequibles, haciendo hincapié en los platos característicos de nuestra tierra, como la ‘Carne de los pobres’, realizada con el Garbanzo de Aracena, incluido recientemente en el Registro Comunitario de Denominaciones de Origen con calidad, o la ‘Albundiga’ o ‘Habas con choco’, y todo ello acompañado de un buen vino del Condado.
Otra de las novedades ha sido el protagonismo que en el interior del Castillo han cobrado los artistas del mundo circense dentro del gran abanico de espectáculos programados, homenajeando de esta forma a equilibristas, malabares y acróbatas.
Y para los más pequeños de la casa, la Feria Franca ha contado con un Rincón Medieval Infantil ubicado en la puerta principal del castillo y donde este colectivo disfrutará de juegos y torneos tradicionales como el tiro al arco, lucha con maderos, juegos de argolla, etc.; aprenderán de primera mano, a través de talleres participativos, los oficios medievales de barro, cuero, pinturas de cara, etc.; y se divertirán con Cuentacuentos que le harán viajar con sus leyendas a la época cristiana, judía o árabe.
De esta forma, y tras nueve años centrada en su exterior, la feria ha vuelto de nuevo a cobrar fuerza en el interior del Castillo, disfrutando de una exquisita programación en un marco histórico incomparable, sin dejar de lado su tradicional programación a pie de la muralla, como la Feria Medieval en el que han participado más de 100 artesanos, la Feria de Muestras del Condado ‘Exponiebla’ situada en el Pabellón Municipal de Deportes, la Feria del Ganado ubicada en el Real y el Taller de Costura Medieval en el que los asistentes aprendieron a confeccionar ropa de la época.
Una feria a la que además de su amplia programación se ha sumado el buen tiempo durante todo el fin de semana.