P. G. Euforia contenida. O sabiamente administrada. Porque Sergi Barjuan, entrenador del Recreativo, se apunta a “tener euforia antes que pesimismo”. Se reconoce ganador y la euforia aparta más a los triunfos, “porque ayuda a ser competitivo, a saltar al terreno de juego más comprometidos”. Eso sí, con mesura: “Si la euforia al final se sabe llevar bien, es buena acompañante. Es mejor tener euforia que tener pesimismo, si la sabemos llevar bien, sin creernos que somos superiores a ella. Así nos puede ayudar”, comentó Sergi.
La semana ‘fantástica’ vivida por el club, con dos triunfos en la Liga y su pase en la Copa han puesto la moral en cotas muy altas. Por eso se le cuestionó al técnico si vivía sus mejores momentos en el Recre. Sergi miró hacia adelante: “Esperemos que no, que venga cosas mejores aún”. Dicho lo cual, recordó que “el año pasado estuvimos tres o cuatro semanas en zona de play-off, estuvimos varios partidos muy aplicados, supimos superar el reto de ganar fuera, además en campos difíciles como el Miniestadi o Valdebebas. Es verdad, este es un momento dulce para todos, no solo para mí, pero cuidado que ahora es más fácil que se vuelva agrio rápidamente. Es más fácil caer cuando ganas, y eso tenemos que evitarlo mañana, o en el siguiente partido”, incidió.
Con el viento a favor de resultados del jugador puede bajar la guardia. Sergi no lo teme: “Tras una semana tan dura como la pasada dimos dos días de descanso. Cuando volvimos, costó arrancar, pero a partir del primer día la gente se fue metiendo en el trabajo, se vio en los entrenamientos un ritmo alto. Saben lo que buscan, lo que quieren ofrecer y eso es una garantía”.
Llega a Huelva el Barcelona B, un rival opuesto a lo que era el Mirandés en la jornada anterior. “Es lo que te encuentras día a día, es algo que se va a repetir en la Liga. Nuestra intención siempre es entrar metidos en los partido, en este y en todos; jugamos con el Barcelona B, y sabemos que si desde el primer minutos somos competitivos, si desde el arranque marcamos nosotros lo que queremos hacer en el juego, a ellos les va a costar más”, aseguró el técnico albiazul, que mencionó como una de las claves del partido “estar mentalmente fuertes para saber que habrá momentos en los que correremos detrás del balón, porque es la esencia suya”.
El balón, y dos equipos que lo quieren. Dura batalla, sin embargo Sergi resaltó que “se le puede discutir la pelota, y lo intentaremos. No va a ser fácil, queremos hacerlo porque entendemos que la única manera de desubicarlos, y que se encuentren incómodos, es que sean ellos los que estén detrás del balón. Difícil, pero por intentarlo no quedará”.
Con todo se ve un Barcelona B inferior al de la pasada campaña. Sergi no está del todo de acuerdo. “Por puntos están mejor que el año pasado. Por nombres tampoco es peor. Hace dos años nadie conocía a Deulofeu, y ahora todo el mundo lo conoce. Mañana veremos quien es el que sale, si es Dongou, si es Sandro. Los nombres no son una preocupación para nosotros. Lo que nos importa es que cada nombre te puede ofrecer una cosa, un registro diferente, y el Barcelona B cuenta con jugadores de mucha calidad”, comentó, abundando en detalles de un rival que conoce: “El Barcelona B tiene una cosa que está por encima de los demás, dentro que tienen una presión, es diferente a la del resto de los equipos. En los partidos ellos van a disfrutar con el balón, y para ellos es como si fuera jugar en el patio del colegio. Además forman un equipo muy sólido porque han mejorado mucho defensivamente”.
Cuando se le recordó que en la campaña pasada el Barcelona B se le dio bien al Recre, Sergi contestó rápidamente: “Las estadísticas están para romperlas”, apostillando: “Cada partido es diferente. El año pasado se nos dio mal el Mirandés y mira ahora. Las estadísticas están para romperse, aunque en este caso me gustaría que no fuera así”.
Aunque Sergi tiene presente que equipos como el Barcelona B pueden venir bien al juego del Recre, porque “nos gusta que haya espacios”, vuelve a insistir en las premisas fundamentales: “Estar aplicados, saber leer en cada momento lo que pretende el equipo rival y nosotros. Porque si estamos aplicados, si estamos con la cabeza metida en lo que debemos estar, huyendo un poco de la euforia, daremos que hablar. Si nos creemos más de lo que somos, mañana podemos caer”.
Una de las bazas que pueden jugar a favor del Decano es su público. Sergi, al decir que “el partido se juega en una buena fecha” y que “la hora nos es mala”, está dando a entender que espera mayor presencia de aficionados en la grada. “Espero que la gente que venga lo haga con el ánimo de ayudarnos en todas las situaciones que nos encontremos mañana. Es muy probable de que suframos, que ellos tengan la pelota, y necesitamos ese cariño del público que nos ayude a reforzarnos y para intentar disputarles el balón a ellos”, confesó.
No soltó prenda sobre si habrá muchos o pocos cambios en el once, señalando que “pasará lo que tenga que pasar. Se han trabajado alternativas, hemos tenido dudas en algunas cosas. En una plantilla tan equilibrada, puede salir uno y entrar otro, porque te dan las mismas calidades, lo que tienes en cuenta es qué jugadores vas a tener delante para elegir a uno u otro”.
Juegue quien juegue, una buena consigna sería portería a cero, lo que dice mucho de la defensa. Sergi alaba a sus zagueros, pero abre el abanico: “Tenemos que intentar que las ocasiones que vayan a tener ellos, sean las mínimas, pero siendo conscientes de que las van a tener. Hay que estar aplicados para que esas ocasiones sean lo más lejos posible de nuestra área, y el primer implicado en esto es el delantero centro, que tiene que saber cuando hay que hacer la presión y como empezarla. Hemos estado trabajando eso, el primer defensa es el delantero, y el primer atacante es el portero”.